Un hombre de nacionalidad dominicana fue detenido este mediodía, sospechoso de ser el responsable del femicidio de Olga Delina Quinteros, docente jubilada de la localidad de Piedra del Águila, en Neuquén. La detención se llevó a cabo en las inmediaciones del consulado dominicano en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), tras un exhaustivo trabajo de inteligencia y coordinación entre las fuerzas de seguridad.
El fiscal Hernán Scordo, encargado de la causa, había ordenado la detención luego de que se conociera que el sospechoso se encontraba en la sede diplomática. Tras ser alertadas las autoridades pertinentes, la Policía Federal logró capturarlo fuera del consulado, y ahora permanecerá detenido en la capital federal hasta que sea trasladado a Neuquén para enfrentar los cargos correspondientes.
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El hallazgo del cuerpo de Olga Delina Quinteros ocurrió el lunes por la mañana, cuando la policía, tras recibir información sobre un vehículo abandonado a la vera de la Ruta 3 en Azul, Buenos Aires, con documentación a nombre de la víctima, se dirigió a la vivienda de la mujer en Piedra del Águila. Al ingresar, la encontraron sin vida y rápidamente se dispuso una investigación que apunta a un posible femicidio.
Los detalles de la autopsia y la investigación
El informe preliminar de la autopsia reveló que la causa de muerte fue un episodio cardiorrespiratorio agudo, posiblemente provocado por estrés o una riña, y que las lesiones halladas en las manos, brazos y rostro de la víctima son atribuibles a una intervención de otra persona, aunque no fueron la causa de su fallecimiento.
Este martes, el fiscal Scordo recibió nuevos elementos que refuerzan la hipótesis de un femicidio. Con estas pruebas, se espera que se formalicen los cargos contra el detenido una vez que sea trasladado a Neuquén.
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Un operativo coordinado entre fuerzas de seguridad
El trabajo conjunto entre la Policía provincial de Neuquén y el Ministerio Público Fiscal fue clave para avanzar rápidamente en la investigación. Fueron parte del operativo el comisario mayor Rubén Escobar y otros efectivos de distintas divisiones de seguridad, como el subcomisario Emanuel Olivera y el personal de Criminalística y Medicina Legal de Junín de los Andes.