En diálogo con Canal E, el economista Agustín Etchebarne abordó la compleja situación de los salarios en Argentina, analizando su evolución, los efectos de la inflación y la necesidad de reformas estructurales.
La caída salarial desde 2017
“Desde 2017 los salarios vienen cayendo y la informalidad es el gran drama de la Argentina”, afirmó el entrevistado al analizar un gráfico sobre el salario real en diferentes sectores del país. Destacó que, aunque los salarios informales fueron los más golpeados durante los últimos años, hoy muestran una recuperación importante: “La buena noticia es que ahora han recuperado fuerte los salarios informales, que son los más bajos y los que más habían caído”.
Aun así, la brecha con los niveles salariales de años anteriores es evidente. “Si lo comparamos con 2017, por supuesto falta un montón de recorrido”, explicó. La recuperación sigue siendo insuficiente para que la mayoría de la población perciba una mejora concreta: “Por eso es esa sensación que tiene la gente: ¿cómo puede ser que digan que se están recuperando, si yo sigo sintiendo que estoy mal?”
La devaluación como enemigo del salario
Uno de los puntos más críticos que marcó Etchebarne fue el efecto de las devaluaciones: “Mucha gente está pidiendo devaluación y pedir devaluación es pedir que te bajen los salarios”, aseguró, y explicó que cuando se habla de que “la moneda está fuerte”, en realidad se está diciendo que “los salarios están altos”. Y preguntó: “¿Les parece que están tan altos los salarios?”.
Frente a esto, propuso una alternativa: “Lo que tengo que hacer es decir: ¿cómo hacemos para aumentar la productividad?”. En su visión, la clave está en reducir impuestos y el costo laboral, no en ajustar salarios.
El gráfico del salario real
El economista explicó que el gráfico que analizaban mostraba el salario en términos reales, es decir, descontando el efecto de la inflación: “Es la caída del salario real. La recuperación es por arriba de la inflación”, destacó. Sin embargo, aclaró que en los últimos meses, con picos inflacionarios en marzo y abril, “hubo una pequeña caída del salario real”, aunque dentro de un proceso de mejora.
El rol de los sindicatos y la informalidad
Etchebarne criticó duramente los privilegios sindicales: “Tenés algunos acuerdos que vienen del año 70, donde el sindicato se lleva un 10% de los salarios”, señaló. En particular, mencionó el caso del gremio de los plásticos, donde el 8% va supuestamente destinado a capacitación.
Etchebarne propuso una transformación del sistema sindical: “Que si vos le querés pagar al sindicato, perfecto. Pero si no le querés pagar, no le pagues”. Su planteo gira en torno a la libertad de elección, apoyado en principios constitucionales: “La gente tiene que ser libre. Libre de pagar si tiene ganas. Si no, que no pague”.
Productividad como solución de fondo
El economista concluyó con una propuesta de fondo: aumentar la productividad mediante acuerdos por empresa que superen los convenios sectoriales: “Si vos haces un acuerdo con tus empleados, ese acuerdo tiene que ser más valioso que el del sector”. Además, remarcó que muchas regulaciones laborales están desactualizadas y perjudican la eficiencia: “Hay contratos con los sindicatos que dicen que solo podés hacer una tarea. Entonces, la empresa tiene que contratar a dos personas. Eso baja la productividad”.
Para Etchebarne, la clave está en modernizar las reglas laborales: “Lo que te venden como mejora muchas veces no lo es. Lo que hay que hacer es aumentar la productividad. Eso es lo que va a permitir tener mejores sueldos y que la Argentina sea más rica”.